domingo, 20 de febrero de 2011

SUS PADRES
















Siempre hablábamos de ellos
de lo viejitos que están
o sus enfermedades
De como le molestaban a veces
los comentarios de su madre
De los mimos a su hijo
De su apoyo constante
Y sin embargo
nunca pude siquiera verlos

Por ironías de la vida
ahora
que tengo en mis oídos
aun su voz dura hablándome al teléfono
gracias a mi estupidez
Me encuentro justo
frente a su casa de nuevo
y al mirar a las ventanas
miro a una mujer viejecita
de cabello blanco
que mira por entre las cortinas
Algo intenta ubicar en la calle
se mueve lenta

Al asomarme más tarde
hay un hombre
quizá de la misma edad
de piel más obscura que la de ella
mas alto
está a su lado
Hablan
Ríen un poco

Tomo mi bicicleta
Podría llegar
y no quiero verla
No...
no quiere verme