urbano
al perro deambulante
funámbulo citadino
de mirada esquiva
Con respeto
observo su cautela extrema
su astucia
escondida bajo
sus carnes estrechas
Toma lo justo
ni una sola gota extra
y reanuda su paso
mirando apenas
el siguiente adoquín
donde posará su pata
De pasado regio
y futuro incierto
parece ser consciente
de su fugacidad perruna
de su alianza tácita
de asfalto e intemperie
Figura espectral entre la niebla
me mira
profundo
intenso
antes de marchar
Profeta silencioso
rumiaré tu enseñanza
rumiaré tu enseñanza