martes, 26 de mayo de 2009

SABIDURIA

Abreva el charco
urbano
al perro deambulante
funámbulo citadino
de mirada esquiva

Con respeto
observo su cautela extrema
su astucia
escondida bajo
sus carnes estrechas

Toma lo justo
ni una sola gota extra
y reanuda su paso
mirando apenas
el siguiente adoquín
donde posará su pata

De pasado regio
y futuro incierto
parece ser consciente
de su fugacidad perruna
de su alianza tácita
de asfalto e intemperie

Figura espectral entre la niebla
me mira
profundo
intenso
antes de marchar

Profeta silencioso
rumiaré tu enseñanza

No hay comentarios:

Publicar un comentario