SENTIDOS

Tu voz
en la que me detengo a escampar
solo para ver como
el aguacero de tus instantes
inunda mi territorio

El olor
casi imperceptible
quizá hecho de mi mismo también
que como rocío
se asienta suave
sobre mis manos
hechas flor para ti

El sabor
del tinto carnoso
de tu boca licenciosa
Y esa tibieza
que con vehemencia
mis labios
intentan atesorar
para espolear aun más mi deseo
por descubrirte
por rebelarte
y predicar por toda la tierra
la buena nueva de tu vientre
reposando sobre el mio
o el trance
en el que caigo
al contemplarte de cerca

Todos
vestigios de tu cuerpo
con los que me arropo
cuando ya no estas